01 enero 2020

Diciembre



El monstruo que empecé a gestar a mitad de año vio la luz en diciembre. 
Vino al mundo sembrando el caos a mi alrededor, mascando odio entre los dientes y enseñando las garras a todo el que se acercaba. La tristeza y la soledad empezaron a visitarnos, cada vez con mas frecuencia, hasta que se instalaron por completo conmigo y mi pequeño gran demonio. Los 4 nos tomaremos las uvas este 31 de diciembre. Aunque les oí hablar el otro día....y me nombraban como parte del menú de nochevieja.
No sé cómo acabará todo esto. No creo que se quieran ir por las buenas, pero no tengo armas para combatirlos. Brindaremos por el odio y la apatía, como nunca quise, y seré devorado por ellos estrenando un enero que se aprecia, de lejos, sangrante.



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