21 noviembre 2012

Habrá que creer...

Un año hace ya desde que aquel 20 N saliera elegido democráticamente Rajoy y su PP (del otro 20N hace unos añitos mas, aunque el contexto se parezca asombrosamente).
Y sólo un año, madre mía, y parece que fueran veinte....cuantas cosas han pasado, han hecho, han desmontado... si es que Alfonso Guerra tenía razón en su célebre frase "..a España no la va a reconocer ni la madre que la parió...".
    Y no, no la reconozco, la verdad. No reconozco esa tierra donde podías confiar en el señor o la señora de tu caja de ahorros de toda la vida, que sabía tus idas y venidas, que copartís esos secretos de tus números rojos o las letras que te faltaban por pagar.
     No reconozco esa tierra en la que nací y habia hospitales públicos donde mi madre dió a luz a sus cuatro hijos, donde cosieron a mi padre cuando una vaca le dió una cornada en las fiestas de su pueblo, donde nos atendian, donde cosieron la cabeza de mi sobrino cuando se hizo una brecha...MAREA BLANCA
    No reconozco esa tierra donde había educación pública y de calidad. Donde existían becas, interinos que cubrían plazas, programas educativos para personas (no para maquinas competitivas)...MAREA VERDE
    No reconzco esa tierra donde se han forjado un hueco los trabajadores sociales, donde se han creado programas de reinserción, de ayuda, de apoyo...MAREA NARANJA
 
Pero..habrá que creer. Habrá que creer que una Huelga General como la del 14 N hizo recapacitar a nuestros supuestos representantes politicos. Habrá que creer que el Congreso no  abre durante sus jornadas de puertas abietas por las obras, no por el miedo a la ciudadanía. Habrá que creer que no habrá más pelotas de goma en las armas de los antidisturbios.
 
Habrá que creer... en Cristo, en la paz o en Fidel.
Habrá que creer, habrá que creer
en algo o en alguien tal vez.